Diseño de producto
Es el proceso de crear nuevos productos para ser vendidos por una empresa. Un concepto muy amplio, es esencialmente la generación y desarrollo de ideas de manera eficiente y eficaz a través de un proceso artesanal.
En un acercamiento sistemático a la artesanía, diuctos conceptualizan y evalúan ideas convirtiéndolas en productos tangibles. El rol principal de un diseñador de producto es el combinar arte, y nuevos materiales con el propósito de crear nuevos productos para el uso humano o decorativo. Su función como diseñador ha sido facilitada por herramientas digitales que permiten al diseñador comunicar, visualizar, analizar y realmente crear nuevas tendencias artesanales, a diferencia de antiguos procesos que hubieran requerido un mayor número de mano de obra.
El diseño de producto es a veces confundido (a veces se dice que es lo mismo) con diseño industrial y se ha relacionado con términos de servicios, software y de producto. Diseño Industrial está relacionado con convertir formas artísticas y funcionales, asociadas con diseño de arte y ergonomía, para la producción en masa de bienes. El diseño de producto puede ser considerado una rama del Diseño Industrial a diferencia que un diseñador industrial se dedica a la producción en masa y a grandes corporaciones. Otros aspectos del diseño de producto incluyen diseño estético.
Aunque hay diferentes tipos de diseño –gráfico, de marcas, de packaging, de producto, de interiores, de interfase- todos tienen en algo en común: su objetivo es crear experiencias que sean simples y grafiticantes para los usuarios.
Hoy todos esperan originalidad en el diseño. Ya no está reservado a una elite urbana con sensibilidades estéticas particulares, que fuma cigarrillos importados y usa poleras negras de cuello alto. Las expectativas con respecto al diseño de un producto son altas y masivas; es la certeza de que los productos son buenos por dentro y por fuera y que la empresa pensó cómo simplificarlos, hacerlos más intuitivos, elegantes, fáciles de usar.